La última vez que la familia de Raúl Fernando Gómez Cincunegui supo de él fue el pasado 11 de mayo, fecha en la que llamó a su esposa para decirle que la moto en la que viajaba se había averiado y que se disponía a cruzar a pie la cordillera de los Andes.
Pese a las extremas temperaturas del invierno austral, el uruguayo logró sobrevivir a casi 3.000 metros sobre el nivel del mar en el refugio Ingeniero Sardina, en el Valle de Los Patos Sur (Argentina) y lo consiguió alimentándose de ratas, azúcar, pasas y sobras dejadas en el refugio por otros alpinistas que habían estado allí antes.
El uruguayo fue hallado por gendarmes argentinos en estado de salud grave, informaron fuentes locales, citadas por la agencia Reuters.
"Se trata de un milagro", declaró el gobernador de la provincia de San Juan, José Luis Gioja, a la agencia oficial Télam.